Este peculiar incidente ocurrió en el encuentro entre Union Berlín y Werder Bremen, por la jornada 31 de la liga de Alemania. En un momento de ataque para el equipo local, el jugador Robert Andrich le pegó tres pelotazos seguidos a Marco Friedl.
El jugador de la Bundesliga vivió la inusual jugada, en la cual fue derribado por los repetidos y fuertes golpes en unos pocos segundos.
La jugada: ocurrió durante un tiro de esquina dado a Berlín. El jugador local remató buscando abrir el marcador, pero la pelota fue directo al defensor rival, que inmediatamente quedó en el suelo. El rebote le volvió a Andrich, quien sacó un centro razo e hizo que la pelota volviera a pegarle al mismo jugador.
Y por si fuera poco, cuando el árbitro ya había anulado la jugada, la pelota quedó en poder del jugador del equipo de Unión, quien por devolverla golpeó de nuevo a Friedl.
Cabe destacar que para el jugador golpeado no valieron la pena los tres remates recibidos, pues el equipo de Werder Bremen perdió.